Alma rota

Creedme,

que esta vida

solo me ha regalado desgracias,

amar a personas

que ni siquiera eran personas,

soñar con un cuerpo

que todo hombre quisiera tocar,

llorar tan sola

que yo misma escuchaba 

como se me partía el corazón,

tararear en silencio 

canciones escritas para dos.

Esa es la realidad, la vida no te da nada.

La vida no va a traer otra vez a mi abuelo,

la vida no les hará pagar

a las personas que tanto daño me hicieron.

Tú mismo tienes que luchar contra ella.

Preferir una mente preciosa

ante un cuerpo frío y distante.

Querer con todas tus fuerzas, aunque duela.

Escribo este poema 

desde la felicidad

que ahora

ha llegado por fin a casa.

Escribo este poema 

tumbada encima del pecho

del ser más maravilloso de este mundo.

Todo llega 

para quien sabe esperar.

Todo llega 

para aquel que sufre en silencio.

Un alma rota,

por mucho que quieran compararla,

es más bonita que cualquier otra.

Porque ha vivido momentos

que nadie se imagina

y aun así está dispuesta

a caer en la tentación

aunque sea su ultimo salto.